Estando Clarita un día bordando
un pañuelo de seda, ha visto un soldado
venir allá por Sierra Morena ha salido
a preguntarle que si viene de la guerra.
Si señora de allí vengo.
¿Tiene usted alguien en ella?
Si señor mi marido,
que quince años lleva
si me diera usted una seña de él
por si acaso yo lo conociera.
Mi marido es alto y rubio
de caballería era
el caballo era blanco,
la insignia bordada en seda.
Por las seña que usted ha dado
su marido ha muerto en ella
y en el testamento dice,
que me case con su prenda
Eso si que yo no haría
Eso si que yo no hiciera
Quince años esperando
y otros quince esperare
y si veo que no viene
monja me meteré.
Y estas dos hijas que tengo
donde las colocare
una les daría a mis padres
que me la hagan mujer.
Y la otra me llevare conmigo
para pedirle a Dios por él
y si acaso no viniera moja
yo la meteré.
abre y mira bien
que soy tu esposo querido
y tu mi amada mujer.
Mucho te quería antes
pero más te voy a querer,
que me has guardado la honra
como una bella mujer.
Post aportado por Antonia Guerrero Sorlózano