lunes, 21 de mayo de 2012

COPLA: DOÑA TEODORA Y DON FIDEL

Doña Teodora le dice a su esposo Don Fidel:

me parece que el gañán mira mucho a la Isabel.

Eso me parece a mi, se me antoja una comedia,

que si el la quiere mucho, mucho, más lo quiere ella.

Esto así no puede ser, hay que cortar por lo sano

y mandarlo a trasladar, y el cuento se ha terminado.

Sabemos que nuestro mozo, es un chico muy formal,

pero que vamos a hacer si no tiene capital.

A las doce de la noche, Pedro estaba en la ventana

palpitando con la novia, que amargamente lloraba,

Pedro dame tu pañuelo que lo borde para ti,

Pedro querido para que te acuerdes de mi.

Pues toma tu mi retrato porque ayer me retraté

que ya nos separan, quiero que me puedas ver

Y con pruebas de cariño, se despidieron los dos.

Y la pobre de Isabel malita fue y se acostó.

¡Ay que malita me he puesto!, la pobre Isabel decía

esto es de no ver a Pedro se me aumenta la agonía,

me palpita el corazón,

y el retrato de mi Pedro me dará fuerza y valor,

y con pruebas de cariño

ya llamaron al Doctor.

Es un pena muy grande, le palpita el corazón

¡ay que rabia me da esto! que me llevan los demonios

de pensar que nuestra hija,

tenga fama “pa” los novios.

Cogeré tinta y papel, y una carta escribiré

Por no perder una hija, por el maldito interés.

Pedro estaba en la besana, siempre acordándose de ella

en sus ojos admite llanto y en su pecho admite pena.

Siente una voz, la del mando

que era la del mayoral, toma esta carta y la lees.

Como un niño echó a llorar, como un loco echó a correr

y el mayoral le decía toma dinero “pa” el tren.

A la entrada de aquel pueblo donde su Isabel estaba

se encontró al enterraor con un pico y una pala.

Que esta mañana a las diez

le hemos dado sepultura a tu adorada Isabel.

Como veis tenia valor de coger el pico y la pala

y enterrar a mi Isabel, siendo mi prenda adorada.

Porqué no me la destierras ahora que nadie nos ve

y besaría sus labios y luego morir después.

Eso no puede ser Pedro,

eso sería una locura,

toda la vida en la cárcel por desterrar una sepultura.

Un favor le voy a pedir, me lo vas a conceder

Dime: ¿dónde está la tumba de mi adorada Isabel?.

Al entrar al cementerio, se quedó mudo y sin habla,

y al cabo de dos minutos salió una paloma blanca.

No te asustará mi Pedro, no te asustarás de mi

porque mañana a las diez conmigo has de estar aquí.

Cuando vio el enterraor lo malito que el estaba

fue y llamó a dos hombres que lo lleven a su casa.

Cuando su madre lo vio, lo malito que el estaba

van y llaman al doctor, a ver si se le quitaba.

El doctor vino enseguida, pero nada pudo hacer

esto son cosas muy fuertes que pasan en el querer.

Ya se murió Isabelita, ya se murieron los dos.

Esto les pasa a los padres, por ser un falso traidor

por no saber corregir, por no saber corregir.

Esto les pasa a los padres por el maldito interés.

Post aportado por Antonia Rodriguez Ruiz

EN UN TALLER DE BORDADOS

En un taller de bordados, donde yo a coser entraba

Un estudiante malvado, que de mi se enamoraba

Por la noche en la vidriera, aguardaba a que saliera de coser

Y al rallar el nuevo día, yo a coser me volvía

Y el a su clase otra vez.

Así pasaron los días, y así pasaron seis años

Sin que nuestras alegrías, sufrieran los desengaños

Te quiero, me decía el embustero

Lo juro, que mi amor es noble y puro.

Benita cuando acabe de estudiar, te lo juro por mi madre

Que nos vamos a casar.

Y al terminar la carrera, a arreglar fue los papeles

A la aldea donde él nació

Y al marcharse dijo espera y esperando y esperando

Pero nunca más volvió

Mi vida ya la tengo destruida, mi sino es marchar un mal camino

Y un día que yo mi cuerpo vendía,

por la calle iba vagando mi perdición pregonando,

pero más me junté allí.

Y yo con raja de ante me puse por delante y le conté mi mal vivir.

Y él con el orgullo de eso me ha escuchado con desprecio

Me miró y se echó a reir,

Yo ya de mi cuerpo no fui dueña

Quise lograr sus desprecios y una albaceteña,

se la “seporte” en el pecho.

Loca puse mi boca en su boca,

sus labios los besé sabiendo agravios

y loca tu no dirás una más por ahí con tus amigos

ya no dirás una más.

Post aportado por Adoración Ariza Sanchez


COPLA

Un domingo por la tarde, llegué a casa de mi vecina,

La mujer que yo pretendo, que se llama Josefina.

Por quien pregunta Vicente?

Por ti mi rosa divina, quiero hablarte unas palabras

Aunque sea en la cocina

Hace tiempo que yo vendo enamorado otra ves

Y aunque tu madre no quiera

Yo te vengo a pretender

Yo te lo digo Vicente, que si mi madre se entera

A ti te echará a la calle, a mi, por las escaleras.

Aunque a la calle me eche, todo lo tomaré a guasa

Si me echa por esta puerta, entro por la ventana.

Yo te lo digo Vicente, y te lo voy a explicar

Me han dicho que eres muy flojo, y no quieres trabajar.

¿flojo yo? Mira Josefina yo gano mucho dinero

yo no soy trabajador, porque mi oficio es barbero

el día que nos casemos, te pondré una buena casa

cocina, sala y alcobas, todas muy bien amuebladas.

Al cabo de poco tiempo han tratado de casarse,

Lo primero que no tiene es dinero para el traje

Pero por fin los casaron, con lo poco que tenían

Pero ahora no tienen casa pa poner la barbería.

Josefina le dice:¿tanto como me ofrecías ?

Y ahora aquello no aparece y esas son las penas mías

¿qué quieres que yo le haga? Si yo no se trabajar,

ni en el campo ni en la villa, ni tampoco se afeitar,

mejor dicho se afeitar, mi oficio ha sido barbero

a uno le corté la cara y a otro no le corté el pelo

y Josefina le dice: como engañas de esos modos

yo me marcho cn mis padres y aquí te quedas tú solo

si tu te vas con tus padres, yo me quedaré en la gloria

porque para mi en el mundo, ya se acabaron las novias.

Post aportado por Adoración Ariza Sanchez

EL GITANO EN EL JUZGADO

GITANO: buenos dias señor juez,

Aquí me tienen ......

Que Dios me libre otra vez

Del sombrero atravesao

Que no lo puedo ni ver.

JUEZ: algún mulo habrás robao, por hacerte de dineros

Si fueras un hombre honrao, no te importaría el sombrero, redondo o atravesao.

GITANO: fue una mula señor, lo que a un payo le lampé

Y como tenia dos, la más mala le dejé, y me traje la mejor.

JUEZ: vamos entrega ese “novimiente”, y será tu salvación.

Antes que yo me impaciente, y te traslade a Mahón, y allí acabes con tu suerte.

GITANO: cómo voy a presentar, una cosa que no tengo

Si cuando voy a robar, es porque primero vendo entre las gentes honrás.

JUEZ: retero de mal pensar, que dices de gente honrá

Que extravías al que robas y al que te llega a comprar.

GITANO: no es tanto la perdición que yo le busco a ese hombre,

Robar se roba a traición pero se vende conforme con que ¿quién es el ladrón?

JUEZ: vamos, si vienes a discutir cosas que a ti no te importan

Llamo a la guardia civil para que te endingen otra y te enseñen a vivir.

GITANO: ¡ay! Señor juez, yo declaro en este instante lo que usted quiere y le diga que en mentándome a esa gente, se me pone la barriga como el que toma un purgante.


EL SOLDADO Y EL CAPITAN

Entra el soldado al despacho del capitán.

CAPITÁN: descúbrase usted animal delante de mi presencia que me va usted incomodando con su poca inteligencia, después que no sabe hablar.

(el soldado no hace caso).

CAPITAN: que se quite usted el sombrero es lo que yo le repito, que lo cojo y se lo quito y se lo pisoteo en el suelo.

SOLDADO: yo no me quito el sombrero porque no le debo nada y la vida del obrero es para mi más honrada que la de usted caballero.

CAPITÁN: ¿eso que quiere decir? Tratarme a mí de ladrón, cuando doy parte a Guadix y lo llevan a Mahón y lo enseñan a vivir.

SOLDADO: antes que venga la justicia y usted vea mi castigo lo he cogido del gañote se ha quedado más morao que un lirio.

CAPITAN: me gusta el hombre de campo porque tiene genio fuerte ¡quién no tuviera esa suerte , aunque no supiera tanto!


Post aportado por Dolores Muñoz Quintana







LA BUENA VENTURA DE LA VIRGEN

La escena pasa en la calle. Santa Ana sentada en la puerta de su casa, un poco triste. Llegan una vieja y una gitana y se encuentran frente a la casa donde está la santa.

Le dice la vieja a la gitana:

LA VIEJA: pobre esposa de Joaquín.

¡cómo siente su desdicha

sentada sobre el umbral

de su modesta casita.

LA GITANA: ¿por bié der mundo entero!

¿quéé tié osté señá Anita?

¿qué le pasa a su mercé

que está tan mogicaía?

¡qué el gaché que la ofendía

gitano se guerva un fía

y se lo encuentre un civil

con las patas añeías,

con el borrico robao

en un callejón sin salía!

LA VIEJA: alguien que la habrá burlao

Viéndola aquí tan solita.

LA GITANA: y una mujé tan honrá

Y en su casa tan metía

¿quién ha sio el mala mare

que ha ofendío a esta señá Anita?

¡igamelo osté!

Voy a armar una tremontina

Que le voy a poner la eta

Lo mismico que una hornilla.

¡igameló osté!

Pa sacarle la sin hueso mardecía

Pa hacerle una corbata

Que le ajuste la tirilla.

SANTA ANA: hija, no me han hecho nada

Pero no tengo alegría

Porque esn este mundo triste

No hay felicidad cumplía.

LA GITANA: ¡pero qué está osté diciendo!

¿qué aquí no hay dicha cumplía

y que no la ha ofendío nadie?

Pos no esté tan afligía.

Desarrugue el entrecejo

Y ponga cara de risa

Quel señó joaquín siquiera

Se merece toavía.

Alargemá osté esa mano

Y en menos que se plesina

Le diré la guena ventura

Por ver si se acomojina.

SANTA ANA: déjeme. No quiero bromas

Ni me gustan las mentiras

¡Si eso que dice usted

no son más que tonterías!


LA GITANA: que me churreteen la cara

Y que me pelen encima

Si no le igo a osté la verdad

¡déjeme señá Anita!

¡alargemé osté la mano

y se la diré en seguía!

SANTA ANA: vamos, que no te la doy

Vete y déjame tranquila.

LA GITANA: ¿qué no me da osté la mano?

¿ni es mesté que esté a la vista!

Que yo me sé de memoria

Lo que dicen sus rayitas

Su manita derecha dice

Que toito en el mundo es mentira

Y que dentro de un año mas tardar

Va a tener una chiquilla

Más bonita que un clavé

Más salá que una salina.

Va a ser más guena que el pan.

Se va a llamar Mariquilla.

Osté se va a poner llena

Y toico el santo día

Va a tener al señó Joaquín

La baba hasta aquí caía.

Que chiquilla tan maharajá

Quía dios que ninguna indigna

Le haga el mal de cacaín

Porque to se guerve envidia


A LA MUJER CASADA

Después cuando seas casada,

Que seas mujer inteligente,

Administra bien tu casa

Y te envidiará la gente.

Si te casa con un pobre

Que solo tenga un jornal

La vida se te hará triste

Para administrar tu hogar.

Pero si estiras la pierna

A donde llegue la manta,

Aunque vivas en pobreza

La pena no será tanta.

No hagas como hacen muchas

Que no ajustan bien la cuenta,

Si el marido gana veinte

Ellas se empeñan en treinta.

Ya se sabe que la vida

Es triste de soportar,

Principalmente en las casa

Donde viven de un jornal.

Siendo buena y virtuosa

Darás gusto a tu marido,

Y aunque no seas hermosa

No se hallará arrepentido.

Después, cuando tengas hijos,

Si los sabes educar,

Cuando todos sean mayores

Siempre te respetarán.

Si de pequeños los dejas

Que ellos sigan sus caprichos,

Cuando lleguen a mayores

Serán peor que los bichos.

Porque somos como plantas

Cuando todos nos criamos,

Si se nos guía pequeñas

Después torcidas estamos.

Debemos aprender todos

Como manda la moral,

Y reinará en los hogares

Amor y felicidad.

Aquí termina el romance,

Para no cansaros más,

Si alguno quiere leerlo

Aquí lo puede comprar.



Post aportado por Dolores Muñoz Quintana

CONSEJOS INTERESANTES A LAS JÓVENES

Mocitas que tenéis novio,

Un consejo os voy a dar,

que os valdrá de mucha honra

si lo queréis tomar.

Tener en cuenta que el hombre,

cuando llega a enamorar,

unas veces ama en serio

y otras solo es falsedad.

Como la joven no sabe

Cuando llega un pretendiente,

Si ama en verdad o en falso,

Debe de ser muy prudente.

Es bien sabido que el hombre

Cuando adora una doncella

La quiere experimentar

Para casarse con ella.

Comienza a hacerle pruebas

Empezando por un beso,

Y la novia si es blanda

Lo quiere dejar contento.

Después del beso otras cosas

El novio llega a alcanzar

Y satisfecho de ella,

Ya no la vuelve a mirar.

Así, mocitas de hoy,

No os dejéis engañar,

Guardar siempre vuestra honra

Que es vuestro mayor caudal.

Este romance no es cuento,

Nos los dice la experiencia,

¡cuántas mozas hay perdidas

por tener poca experiencia¡

hay jóvenes discretas

que sabiendo guardar su honra

pero otras son muy coquetas,

por ligereza la borran.

No resisten el impulso

De la pasión sexual,

Y hoy lloran su desvergüenza

Sin poderlo remediar.

Si el joven que te pretende

Lleva buenos pensamientos,

Como te halle liviana

Te aborrecerá al momento.

En cambio, si te camela

Por lo que pueda sacar,

Como vea que eres decente

Contigo se casará.

Post aportado por Dolores Muñoz Quintana

LA CONFESIÓN DEL GITANO

PERSONAJES: CURA Y GITANO.

GITANO: pare vengo a confesarme.

CURA : ¿A confesarte?

GITANO: A eso vengo, a ver si quie usted y de gratis perdonarme los pecaillos que tengo.

CURA:¿eso es cierto?

GITANO: se lo juro

CURA: al confesionario iremos.

GITANO: pare, que ese sitio es muy oscuro, este sitio es mas seguro y aquí la cara mus vemos.

CURA: arrodíllate.

GITANO: tampoco, que es mu mala postura, ¡aunque estuviera yo loco! Aquí d pie señor cura, mía que me las toco.

CURA: ¿Algún ángel te ha inspirado a que busques confesión? Ven siéntate a mi lado, cuéntame lo que has pecado que Dios te dará el perdón; dime tú ¿sabes rezar?

GITANO: pare, neica.

CURA: válgame Dios, para confesar por el rezo hay que empezar.

GITANO: pues rece usted por los dos.

CURA: bien, empecemos el rezo, ve diciendo conmigo: yo pecador me confieso......

GITANO: pare, yo no entiendo eso.

CURA: repite lo que te digo

GITANO: ¡miste, menos líos! Ya le digo que no se, con que vamos al avio que si no aligera usted, me voy a poner rebenio.

CURA: hombre no seas así, no te impacientes, ten calma, que yo rezaré por ti para conseguir así la salvación de tu alma.

GITANO: ¡oh, qué tío y que buen cachorro está!

CURA: Venga, cuéntame hijo mío.

GITANO: pare, si es que no me fío de isirle a usted la verdad

CURA: ¿temes que yo te delate? El confesor no hace eso.

GITANO: nunca diga disparate, que lo cojo del gaznate y lo dejo patitieso.

CURA: no tengas miedo hijo mío, tu secreto guardaré.

GITANO: vargame onde me metio, en fin lo contaré, su pellejo guarda el mío.

Yo tengo unos pecaíllos revueltos con pecaotes, unos son más chiquitillos otros son más grandecillos como mulas de grandotes. Y tengo algunas cosillas que ya no pueo aguantar, porque me hacen cosquillas y si es en lo de afanar, Pernales se queó en mantilla.

CURA: dime todos tus pecados sin ocultarme ninguno, perfectamente explicados y no tengas miedo ninguno que ellos serán perdonados. Empieza ya, ve diciendo.

GITANO: miste pare, yo fui a una fiesta cuando estaba el día rompiendo y me encontré a mi gitana que se estaba divirtiendo, era un gaché que vestía lo mismo que viste usted, con el que se divertía, y al verme entrar mare míase giñó encima el chipé, yo iba un poquillo mojao, pero no me arrebaté, cogí el mono disfrazao y por lo alto del tejao a la calle lo largué. Ella principió a gritar y yo porque no gritara le largué una bofetá que algo más de la mitad se le perdió de la cara. A los gritos infernales, que soltaba el amor mío, acudieron los curiales a recoger los quijales que en toavía no han paecio. Se echaron encima mío lo mismico que chusqueles, pero yo me encogí, le di aire a mis pinrreles y como un rayo salí.


Tomé viento y me largué, y en la calle al primer paso con Chuti me encontré que de un solo puñetazo sin narices lo dejé.

Aquello fue más sonao que en Toledo la campana y quedé recomendao pa bailar las sevillanas con un gori en un tablao. Desde aquel maldito día no me dejaron parar, como se me perseguía, pa ganarme le comía pues me dediqué a afanar. Mangué un pollino en Lucena, un jaquilla en Carmona, una muleta en Purchena, dos mulos en Estepona y un caballo en Trebujena. Y usando las mañas mías y sin pecar de ignorancia me hice en muy pocos días hombre de gran importancia, tratante en caballería.

Cuando menos lo pensé me hizo traición un judas, me escurrí y lo escabeché y entonces me dediqué a robar cosas mengua: a un fraile muy gordinflón de los que cantan en coro, al darme su bendición, le afané una cruz de oro, tres duros y un medallón. Entré a una iglesia a rezar y en un rincón me escondí cuando me quise muar se vino detrás de mi to lo que había en el altar. A un perro un collar quité creyendo que era de plata, cuando al venderlo llegué arrendó que era de hojalata, cogí el perro y lo maté.

Me encontré un cura en un prao que se empeño en confesarme y después de oírme asustao no se atrevió a perdonarme y lo enterré en un sembrao.

Qué tal mi confesión, flaquezas de ser humano. ¿me da la bendición?

CURA: si hijo y Dios soberano te concederá el perdón.

GITANO: entonces, pueo seguir.

CURA: Abreviando.

GITANO: está bien, abreviaré. Ya ve usted que afanando la manduca me gané, a nadie un chavo cedí y to el que se arrimó a mi, buen recuerdo le dejé. Que mieo que he tenio, siendo un tontico tan listo a donde quiera que me he metio, lo que mis ojos han visto mis manos lo han recogio. He sio muy aprovechao y tenio mucha suerte que no hay feria ni mercao en toica la España donde no me halla empleao.

CURA: ¿te queda más todavía?

GITANO: sí, pasé una aventura una vez que fui a emplearme al pueblo de Extremadura, al no tener que llevarme, me llevé a la mae del cura.

CURA: hoy no tienes salvación, poder salvarte no esperes, si le ha entrao a usted quemazón, ¡desdichao! Esas mujeres sagradas del todo son.

GITANO: no lo sabía eso yo, pero a mi se me figuraba que fue también otro cura el que a mi me la quitó.

Bueno, yo ya he terminao. ¿puede perdonarme o no?, porque si queo condenao con usted voy a hacer yo como con aquel del prao

CURA: si, si te absorberé aunque es cosa grave, pero ya está echo.

GITANO: que quiere usted por la gloria de mi madre, que otra vez no lo haré.

CURA: yo te perdono hijo mío de Dios en el nombre santo, procuras confío desde hoy ser un buen hombre.

GITANO: eso siempre lo he sido.

CURA: bueno, ya estás listo marchate.

GITANO: pare y ahora que me acuerdo no se si volveré y por si acaso me pierdo y no vuelvo a ver a usted, ¿porqué no me da un recuerdo?

CURA:¿un recuerdo?

GITANO: claro está, peor que si ni ayer ni hoy gané na ¿porqué no me da dos duros para que me puea aviar?

CURA: ¿dos duros?, tómalos y vete ya.

GITANO: válgame que tonto he sio, he hecho una barbarie, si mas le hubiera pedio lo mismo me lo da.

CURA: anda con Dios y con suerte y que no vuelva a verte por siempre jamás amén.


Post aportado por Antonia Guerrero

DESGRACIADA LA MUJER CASADA (TEATRO)

PERSONAJES: Mujer joven, marido viejo y sacristán.

LUISA: desgraciada la mujer casada en su tierna edad con un viejo impertinente que mira con gravedad. Pues bueno está, ya lo hice, bien empleado me está por darle gusto a mis padres y por un poco de caudal me casaron con un viejo que no puedo tolerar.

Por supuesto que se va todos los días al campo, pienso el tiempo aprovechar, divertirme cuando pueda con mi amado sacristán.

VIEJO: Luisa

LUISA: ¿qué?.

VIEJO: me voy al campo, echa en las alforjas dos huevos, un limón y una tajá y unas cuantas aceitunas que allí me voy a almorzar. Que los jornaleros van y en no estando uno delante todo el día se les va en tres chagos y porfías y ná de trabajar.

LUISA: Paco contigo me voy que sola no quiero estar.

VIEJO: no, que el sol es muy fuerte y picante y se te puede pegar y al ponerte morena, no puedes tanto agradar.

LUISA: siempre tienes esas chanzas, que nunca gusto me das.

VIEJO: si son chanzas o son vegas, al fin ya se verá.

(voy a hacer que me voy y encasa me voy a estar, a ver si me la da Luisa con su amado sacristán).

LUISA: anda con Dios gran pelmazo si no volvieras jamás fuera el gusto cumplido que yo pudiera lograr.

¡ay!ma asomaré a la ventana a ver por si viene el sacristán.

SACRISTÁN: (toca a la puerta )Dómine, ábreme la puerta que he estado puesto al acecho hasta que he visto pasar el burro Jaime que tanto me hace penar.

LUISA: pues, ya te iba yo a avisar que paco se había marchado, pues mi vida estaba ya por tu pecho palpitante.

VIEJO: ton, ton (toca a la puerta) abre Luisa de mi vida que si no me abres la puerta entro por la rendijilla.

SACRISTÁN: meteme debajo de esta mesa, ponme delante esta silla, tápame con este paño y no escaparé sin paliza.

LUISA: (abre la puerta)¡ay Paco! Bien me puedes perdonar que he estado viendo la “llueca” `por si iba a sacar.

VIEJO: no eres mala “ trapesera”, si me dijeras el gallo, más fácil es que lo creyera. ¿qué hay aquí?

LUISA: el niño de la comadre que ha estado aquí y lo ha dejado tó revuelto .VIEJO: (trae en la mano un garrote) salga usted señor escondido, salga usted aquí fuera y dígame que ha venido a por aceite y por velas.

SACRISTÁN: ¡AY! Vine pidiendo limosna para la madre abadesa, “ pa” rezarle a San Nicasio en los días de su fiesta, que al descargar el garrote lo hiciera con clemencia.

VIEJO: le encargo a los ancianos cuando de casarse pretendan, que no lo hagan con mocitas que es terrible la torpeza.


Post aportado por Adoración Ariza Sanchez

CANCIONCILLA

Tengo una novia señores

que si os la presento, os vais a pasmar.

Tiene un sinfín de defectos

que ahora en secreto, os voy a contar.

Tiene las piernas torcidas,

le falta una oreja, no tiene nariz.

Y si la ves cuando anda,

parece una gamba la pobre infeliz.

Tiene cara de gorila

es más chica que una anguila,

tiene granos a montones

y en los dedos sabañones

y un ojo puesto cristal.


Cuando le beso la boca

me echa un olor a cebolla

que no se puede aguantar.

Tiene una cara de pecas

que no se puede mi mirar.

Tiene 63 años

Y ya tiene canas, por delante y por detrás.

Post aportado por Adoración Ariza Sanchez








EL ZAPATERO

ZAPATERO: bendita sea la Macarena una rubia muy gitana tiene su cuerpo más curvas que la sierra de Granada.

SEÑORITA: ¡oiga maestro!, quiero unas botas de ultimísima moda.

¿Me la hará usted?

ZAPATERO: sí señorita con mucho gusto, tomo medida, ponga usted el pie.

¿Las quieres altas?

SEÑORITA: tan altas no.

ZAPATERO: ¿vaya unas piernas!

SEÑORITA: ¡Vaya un guasón! Quiero el tacón, que al andar me haga el pie, bien elegante y usted verá si de puntera o abiertas por delante, y usted verá como maestro de primera, tan solo quiero yo que a todo el mundo llame la atención.

ZAPATERO: Puntera fina, tacón de moda y 10 botones a de llevar.

SEÑORITA: Para mi gusto le pone siete

ZAPATERO: Quien paga manda, y no hay más que hablar.

SEÑORITA:¡Vaya un maestro tan apañao!

ZAPATERO: Chica de barde tendrá calzao.


Post aportado por Dolores







LA CONFESIÓN DE UN NOVIAZGO

El:

Dónde vienes Rosalía

tan guapa y apañá

yo canto de noche y día

sin ti no se de ná.

¿Echamos una porfía?


Ella:

Yo no tengo inconveniente

por echar una porfía

vamos a molar el diente

cuando llegue mediodía.

a ver cual es más valiente .

El:

Con tu tipo de gitana

y tus enaguas noleras

tienes más gracia serrana

que tó Sevilla entera

bailando las sevillanas.

Ella:

Es un ramo de locura

lo que te voy a decir

me gusta tu compostura

tu simpatía y tu ardil

mas que a un gato una saura.

El:

Eres guapa y apañá

eres como yo quiero

yo te digo a ti chiquilla

que vales más que el mundo entero

sembrado de moneillas.


Ella:

Eres un hombre agradable

y de buena condición

voy a decirle a tu madre

la que te quiere soy yo

y no se lo vendas a nadie.

El:

Son tus ojos dos braseros

que alumbran de madrugada

y tu cara una azucena

eres guapa y apañá

viva tu gracia morena.

Ella:

Tienes un tipo elegante

un hombre a carta cabal

a mi me gustas bastante

pero estoy esollipá

me vayas a dar el plante.

El:

Tú te haces muy sabía

en que te voy a engañar

te voy a dar una salía.

Y me voy a veranear

aunque sea a las Tenerías.

Ella:

Eres un tonto perdio

no lo puedes remediar

no te quiero “pa mario”

te puedes ir a buscar

espárragos al baldío.

El:

Tú pareces una chicharra

de esas que canta de día

En lo alto de una chaparra

eres fea y presumía

y tienes pella y la rarra.

Ella:

Eres un sapo trabao

en medio de un cenagal

no te quiero ni pintao

te puedes retirar.

Que aquí está to pagao.

El:

Yo te digo a ti chiquilla

que eres un lindo estropajo

tienes tipo de flaquilla

y te asoman por debajo

haciendo la pelotilla

doscientos escarabajos.

Ella:

Eres un gato asqueroso

no te quiero ni mirar

el hocico como un oso

siempre soltando patás

como un mulo malicioso.

El:

Eres una cabra loca

sin cencerro y sin bozal

tienes muy grande la boca

y no te han querio ordeñar

porque la leche es muy poca.


Si alguno le diera deseo de conocer al poeta

para no dar mucho rodeo

es natural de la Venta

y tiene veinte y un deo.

Post aportado por Rafaela Torres Delgado

RELACIÓN DEL CASADO

Me prestáis atención los que escuchándome están

al oír mi relación os llegareis a enterar,

de aquello que le sucede, al que se llega a casar

con unas de estas mocitas que hoy criándose están.

Que la vida de mocito, no hay nada que contar

Se anda por donde quieres, y nadie le pide pan

ni garbanzos, ni tocino, ni el aceite, ni la sal.

ollas, platos, ni lebrillos, ni la artesa pá amasar.

Nada más que divertirse, comer bien y disfrutar,

tomar las copas de vino y el día que no hay jornal

estar a de fulanilla, viendo la más apañá.

Pero esto les sucede, a los que se las suelen llevar

antes de que sean capaces de freír una tostá,

de hacer un punto media, ni de barrer, ni fregar,

ni de cocer un puchero, ni de hacer una ensalá,

más vale que todos juntos os tiréis a la mar.

Pero son tan alagüeñas y tan tunas y además

que algunas con trece años o catorce tó lo más,

se ponen la cabeza de “goma caracolá”,

con unas flores en el moño que parecen un rosal,

más orquillas y peinetas

que arena lleva la mar,

así ponen al hombre como manteca sin sal

Miralás con los vestios que garbosas que van,

parecen que llevan puesta la funda de una almohá:

de atrás angostas cortillas que apenas pueden andar,

que ni una hebra de hilo pueden ellas saltar.

Pues deja, que ya casado, son las penas más colmás

cuando ven que todo el gasto lo costea el pobre Juan.

Se ponen alicaías, que apenas pueden andar

teniendo miles deseos, no quieren comer de ná

Porque ellas sus deseos no son de ir a lavar,

ni de ir a buscar leña, ni de coger aceitunas,

ni en verano arrancar.

Sino en el mes de enero apetecen ensalá,

Cuando no hay lechugas ni en la orillas del mar.

Y le dicen al mario:

  • Yo así no adelanto ná.

como pille una endeblez, sin mujer vas a quedar.


Y ya el hombre atemoriza, y va a por el médico a Graná.

Y cuando el médico viene y le comienza a pulsar,

le nota que es embarazo y entonces ya sanará.

Y le dice ella al mario:

  • lo has escuchado, Juan. Ya tienes que prepararme para que vaya a comprar el atillo, por si luego yo me pongo mú pesá, mi cuerpo no está en paraje ni de dar una puntá.

A de ir la costurera, ganando muy buen jornal,

Otra mujer a de ir para ayudarle a guisar,

y una niña por lo menos para barrer y fregar.

Y se lo tiene que apañar, vaya que por los diablos,

se le vaya a desgraciar y entonces ya tiene el hombre

sermón para una temporá.

Porque si ella da mucho,

la suegra no digo ná,

mejor que os pille el tren en la vía de Graná

que vivir con una suegra cuando se pone enfadá.

Post aportado por Rafaela Torres Delgado

LA FAMILIA POBRE

Esto era una familia de campo, vivían en la miseria no tenían nada para comer. Tenían dos hijas y un día no tenían nada para mandarle de comer al marido que se encontraba trabajando en el campo y pensó en matar a una de las dos hijas.
A una la mandó a por el pan y a la otra a por aceite y le dijo: la que venga antes le doy un caramelo. Llegó la más pequeña y le dice la madre acuéstate cuando despiertes tendrás el caramelo debajo de la almohada y cuando quedó dormida entró y la mató. Al poco rato llegó la mayor y le pregunto por la hermana y le contesta la madre: no ha venido todavía . Tú vas a ir a llevarle la comida a tu padre y cuando vengas te daré el caramelo.
Pero ella se dio cuenta de que su madre le había mentido. Cogió el cesto y empezó a caminar y de vez en cuando se paraba y destapaba la olla, una de las veces vio un dedo y continuó, pero no cesaba de llorar. Se le apareció una abuela y le preguntó:
-¿Por qué lloras?
Por que mi madre ha matado a mi hermana y se la llevo a mi padre para que se la coma.
Pues no llores, dijo la abuela, tú vas a hacer lo que yo te diga:
Tu no comas y todos los huesos que tu padre tire los recoges, cuando llegues a casa los siembras y todos los días los riegas y ya veras.
El padre empezó a comer y la niña cogía todos los huesos, el padre le dice:
-¿Tú no comes?
Yo no tengo apetito.
-¿Para qué quieres los huesos? (le dice el padre).
Para el gato, le dice la niña.
-Los gatos no comen huesos.
-Pues para el perro.
-Tampoco come huesos, dice el padre.
-Pues para jugar con ellos.
La niña todo lo hizo como le abuela le había dicho.
Una mañana cuando fue a regarla vio que la tierra estaba removida y un poco más lejos había una niña con una cesta de caramelos y flores.
La niña se sorprendió y llamó a sus padres y se acercaron y le dijo la madre:
-¿Dáme un caramelo?
No, que me mataste.
Se acercó el padre y le dijo:
-¿Dáme un caramelo?
No que me comiste.
La hermana se acerca y le dice:
-¿Dáme un caramelo?
Tómalos todos que me sembraste.

Post aportado por Antonia Guerrero

EL HIJO DEL REY MORO

El Rey moro tenia un hijo que Pepito se llamaba.

Una tarde en el paseo se enamoró de su hermana.

Viendo que no podía ser, callo malito en la cama

subió el padre a visitarlo, ¿qué tienes hijo del alma?.

Padre unas calenturitas que el corazón se me abrasa

¿Quieres que te mate un ave, de esos que se crían en casa?.

Matémelo usted mi padre, que me lo suba mi hermana

como era verano ella subió en enaguas blancas.

Al subir por la escalera como un león se abalanza

la echo sobre la cama le hizo todo lo que le vino en gana.

Al poco tiempo de aquello su padre la remiraba.

¿Qué me mira usted padre mio?.

Hija no te miro nada, me aparecido

que tienes cara de mujer casada.

Vienen médicos a verla de Sevilla y de Granada

unos le tocan el pulso y otros le miran la cara

y otro le dice a su padre su hija esta embarazada.

A pique de los nueve meses nacía una rosa temprana

con el nombre en los pañales, hija de hermano y hermana

Post aportado por Francisca Mesa