Era un domingo de Mayo
a esto de las doce y media,
Cuando coji mi caballo
y me fui a con ella.
Tenia la novia en el campo
Su padre no me quería
y medio he sufrido tanto
como yo entonces sufría.
Cuando a su puerta llegué
todo silencio estaba
y solo sentía a una mujer
que amargamente lloraba
Sujeté mi caballo
que con tanto afán trotaba
mire por la cerradura
y vi a mi Lola querida
que con su padre luchaba.
Echo mano a la cintura
que una pistola llevaba
y muy pronto la vi sola
y de la lucha apartada.
Ella a la calle salia
porque yo corrí al momento
a contarle a la justicia
todo mi acontecimiento
llegue
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